LA FIESTA
Con más de dos siglos de historia, la Fiesta de La Tirana es la tradición más atractiva del norte de nuestro país. Baile, música, religión, rito y milagro son algunos de los tópicos que hacen de esta celebración religiosa un patrimonio intangible inigualable en la región.
Lejos de ser un pintoresco carnaval La Fiesta de la Tirana es una ceremonia con carácter sagrado, que en su conformación incorpora los albores de la cosmovisión andina, la religión y costumbres acuñadas de occidente, los procesos migratorios y la conexión del hombre con el místico entorno del desierto.
A mediados de julio, entre el día 12 y el 17, el pequeño poblado de La Tirana convoca a miles de peregrinos chilenos y extranjeros, que cruzan mares y montañas para reunirse en medio de la Pampa del Tamarugal, para pedir y celebrar a la Virgen del Carmen, la madre del desierto.
Turistas, fieles y múltiples cofradías de bailes llegan en cuanto medio de transporte hay, inclusive a pie para pagar las mandas y rendir culto a la reina del altiplano. Así, el que es un pequeño enclave del desierto se llena de comercios locales provisorios, campamentos y hostales. Mientras la Iglesia de Nuestra Señora de Carmen de La Tirana y su imagen de la virgen esperan, ornamentadas de gala, sus visitantes.